¿Cómo puedes luchar contra el PepMV (virus del mosaico del pepino)?

El virus del mosaico del pepino, también conocido como PepMV, es un virus que se encuentra por todo el mundo y afecta a los cultivos de tomate. El virus se transmite de forma mecánica y es altamente contagioso. Una vez que el PepMV está en la producción, es difícil prevenir una mayor propagación.

¿Cómo puedes luchar contra el PepMV (virus del mosaico del pepino)?

Síntomas del PepMV

El PepMV en el cultivo de tomate puede reconocerse por varios síntomas, dependiendo de diversos factores como el momento del contagio, la edad de la planta y las condiciones en que se encuentran las plantas (clima y temperatura). Los cultivos jóvenes infectados muestran principalmente hojas parecidas a las ortigas y abultadas. Las hojas más viejas, en cambio, muestran un color gris con clorosis entre las venas. Además, como dice el nombre del virus, a menudo aparece un mosaico en la hoja. En una etapa posterior, un jaspeado de manchas rojas y naranjas será visible en los frutos. Los frutos también pueden crecer abiertos y las coronas de los frutos a veces se vuelven marrones.

Además de los síntomas anteriores del PepMV, también se sabe que la necrosis puede ocurrir tanto en las hojas como en el tallo de la planta. La necrosis debilita la planta, haciéndola más susceptible a las enfermedades y plagas.

Combatiendo el PepMV

Actualmente no es posible combatir el PepMV. Por eso es importante que tomes las medidas de higiene correctas para mantener el virus fuera de tu zona de producción. Por lo tanto, asegúrese de tener un protocolo de visita establecido y medidas de higiene necesarias a la entrada.

A pesar de las medidas anteriores, el virus todavía puede “entrar” dentro de la finca o invernadero. Por lo tanto, también tome medidas para prevenir cualquier propagación. El virus del mosaico del pepino PepMV se propaga a través de las operaciones de cultivo como el deshoje, labores de manipulación y la cosecha. Además, los materiales contaminados como cuchillos, tijeras y ropa pueden transmitir el virus. Por lo tanto, asegúrese de que los empleados desinfecten regularmente sus manos, cuchillos y tijeras.

Si el PepMV está presente en el cultivo, asegúrese de erradicarlo durante la rotación o cambio de cultivo. Puede utilizar un protocolo de higiene para tomate por ejemplo. Si el agua de drenaje está contaminada, desinfecte el agua.

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